Eran finales de los 80`s y como niños precoces pre-Trainspotting recorríamos las calles buscando “tono`s” –término de la época para calificar a una fiesta-. Para aquel entonces, el terrorismo había dejado noico al Perú, a los adultos, porque cuando uno es chiko se guía por el instinto. No habían tantas discotecas y la gente hacía tono`s en sus casas. Siempre había una fiesta y aún sin conocer a nadie solo los elegidos merecíamos entrar. Conversar, beber, esperar que pongan buena mùsica y al final… estar pendiente de la balada de ley. Pero antes de todo, al reunirnos comprábamos un trago –como ahora- , un Cartavio, un 100 Fuegos con Tang (¡!!!) o hasta esos rones venezolanos de moda… pero NUNCA un Pisco, porque su sabor en aquellos años era horrible, el Pisco Vargas el peor, seguido por el Queirolo. Parecía que se usaba para hacer exorcismos, nada aguantaba ese sabor. Aquellos que vivieron esa época podrán confirmar la desazón de mi paladar vulnerado por aquel liquor nefasto.
La noche del sábado 19, en la tertulia apasionada del clan, mi pregunta de apertura era ¿cuándo cambio ese horrendo sabor barato? ya que en los últimos años el Pisco ha mejorado su calidad en un delicioso sabor. Asimismo se ha brindado una promoción incansable en los medios de comunicación y es ahí donde los seudos expertos no se han referido en la “cosecha ochentera” sufrida.
En la conversa forcé la memoria y regrese a 96/97, en las juergas de facultad comprè en Wong de 2 de Mayo un Pisco de precio promedio, Sol de Lunahuanà –quería cruzarlos a todos- y me tope con un buen Pisco, distinto a los de mi niñes. Repitiendo el placer en un par de noches posteriores.
La tertulia!… analizan que fue cuando Chile pretendió apropiarse del término, que ahí se generó el cambio de la calidad, ahí se emprendió la mistificación como producto colonial e ideal en todos los estratos sociales, incluyéndolo incluso como sazonador en varios platos gastronómicos típicos y experimentales huachafos. Reconociendo que gracias a Chile se mejorò el estándar y se renovó el amor de todos por el trago de bandera. Dicen que en los 80`s existía el Viondi como un muy buen Pisco, solo que caro, no al alcance de todos. Ademàs, que en las chacras quienes cultivaban uvas o producían vinos tenían sus propios Piscos, que eran muy buenos, no comercializados, sino compartidos entre familia o amigos. Sobre mi pregunta… no se si fue porque nos quisieron quitar la terminología que todo mejorò o sencillamente fue “pos no mas”.
Si bien no he mantenido una continuidad pisquera, por ser de paladar infiel, entre tentadoras Tekilas, Jack Daniels y Ballantines –todo trago es una mujer, al final te hace perder la cabeza-, pero en estos últimos años està presente en las juergas un Pisco y su fogoso sabor.
Mi siguiente pregunta fue ¿por què no todos los lugares o países que prepararon vino también no lograron preparar el pisco?. Disque, en Italia casi casi, ellos tienen la Grapa, solo que en su elaboración incluyen las ramitas de los racimos, dándole otro sabor.
Históricamente, se creó el Pisco porque nos tenían prohibido preparar vino, ya que siendo la etapa de la colinia debíamos comprarlo de España.
Mi tercera pregunta fue la última…¿qué creen que esté haciendo ella a estas horas con su figura alocada?
Juan J.Espejo Fernández
P.D. Una chica talentosa -Mairyn Cruz Bernal- me pregunta si las fotos aquí son tomadas por mi, pues… pensaba que eso se sobreentendía(!!!). Parece que kiere una de mis fotos de los àngeles del Presvìtero para la portada de su poemario Cielo Pàjaro... a ver pues.
Ave Fantasma /JNCHZ/In lak`ech
21909
